El Senado de Tennessee aprobó por unanimidad la “Ley de Bentley” que consiste en que aquellos conductores ebrios que provoquen choques y muertes, deberán pagar manutenciones a hijos de las víctimas mortales.
La Ley de Bentley tiene como objetivo responsabilizar a los conductores ebrios al exigirles que paguen la manutención de los hijos si alguno de sus padres muere en el accidente, hasta que ellos tengan 18 años y se gradúen de la preparatoria.
En caso de que el acusado esté encarcelado y no puede pagar, le otorgarán un año después de su liberación para comenzar a pagar, en caso de que el niño cumpla los 18 años pero no le hayan pagado en totalidad los años que le deben, según el proyecto de ley.
Dicha ley fue nombrada de esta manera por su creadora Cecilia Williams, quien lo hizo en honor a su nieto de cinco años y aunque aseguró que ninguna cantidad de dinero compensará la pérdida de vidas, al menos ayudará en lo económico a los niños.