En su reporte 20-F entregado a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), Pemex expone que el monto autorizado hasta el momento es de 16 mil 816.3 millones de dólares.
La refinería tenía un presupuesto inicial de 8 mil millones de dólares, por lo que el monto más reciente implica un aumento de 104 por ciento.
«El presupuesto autorizado actual para el proyecto es de 15 mil 963 millones de dólares, IVA incluido, más 853.3 millones de dólares para la puesta en marcha, incluido el IVA», detalla el reporte.
En cuanto a la entrada en operación de la refinería, la empresa estatal espera que durante el primer semestre del año logre estar en la etapa de estabilización del complejo, para que en el segundo semestre comience con el procesamiento de crudo de manera gradual mientras entran en operación las diferentes unidades.
«La operación estable de la refinería dependerá de la estabilización de las diferentes unidades de procesamiento. A la fecha se encuentran en ejecución los trabajos de pre puesta en marcha de la refinería», según el documento.
Peligra Pemex sin aportaciones del Gobierno
La operación de Pemex como negocio petrolero podrá estar en riesgo si el Gobierno no mantiene el apoyo económico a la empresa estatal.
En el reporte, la petrolera que dirige Octavio Romero Oropeza reconoce que está en una situación compleja por una sustancial deuda, otros pasivos e importantes restricciones de liquidez, lo que le dificulta la obtención de financiamiento.
«Podría afectar negativamente nuestra condición financiera, los resultados de las operaciones y la capacidad de pagar nuestra deuda y, en última instancia, nuestra capacidad para operar como un negocio en marcha sin apoyo adicional del Gobierno de México que es posible que no recibamos en los próximos años», admite Pemex.
La compañía señala que ha incurrido en gran parte de su deuda por el financiamiento en sus proyectos de inversión de capital, pero que ahora se encuentra limitada para el desarrollo de nuevas reservas de hidrocarburos.
«Nuestro flujo de efectivo de operaciones en los últimos años no ha sido suficiente para financiar nuestras inversiones de capital y otros gastos y, en consecuencia, mostró un aumento significativo en nuestra deuda.
«Por lo tanto, para desarrollar nuestras reservas de hidrocarburos asignadas, pagar nuestra deuda y amortizar los vencimientos de deuda programados, necesitaremos obtener fondos de una amplia gama de fuentes, además de iniciativas continuas de eficiencia y reducción de costos. No puede haber garantías de que continuaremos teniendo acceso al capital en condiciones favorables o en condiciones en absoluto», indica el reporte.