Policías de investigación de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México e integrantes del grupo de inteligencia de la Secretaría de Seguridad del Estado de México realizaban un recorrido por calles de Acolman y en la esquina de Claveles y 28 de octubre encontraron al matrimonio conformado por Rutilo “N”, de 34 años y Karla Magdalena “N”, de 25 años, que transitaban durante la madrugada por ese lugar.
Los miembros de las corporaciones estatales se percataron que jalaban un tambo de plástico color azul en un “diablito”, por lo que les preguntaron qué llevaba en su interior.
El hombre y la mujer, nerviosos contestaron que no tenía nada en el interior el recipiente. Después los dos quisieron huir pero fueron detenidos por los oficiales.
Abrieron el tambo y observaron que el cuerpo de una pequeña cubierto con tierra se encontraba adentro.
Rutilo y Karla Magdalena contaron a los policías que la víctima era una niña de 4 años de edad llamada Jade, la cual iban a enterrar de manera clandestina en algún predio de esa comunidad.
La pareja también llevaba consigo una pala para escarbar y depositar el cadáver de la menor.
Los dos arrestados antes de ser trasladados al Ministerio Público contaron a los elementos de la Fiscalía y de la Policía Estatal que desde el 8 de enero la madre de Jade, identificada como Brenda, quien supuestamente es menor de edad, la dejó con ellos porque no quería hacerse cargo de la pequeña.
El matrimonio aceptó que tampoco querían tener bajo su custodia a la niña, por lo que no le daban de comer y la dejaban en el patio de su domicilio, sin cobijo.
Según los acusados, el martes 12 de febrero la infante murió de frío. Para deshacerse del cuerpo la metieron en el tambo y para que no oliera mal le echaron cal y lo cubrieron de tierra también.
Ocho días estuvo el cadáver de Jade dentro del recipiente de plástico y la madrugada de este miércoles decidieron sacarla de su casa para enterrarla de manera ilegal en un terreno de la colonia El Paraíso.
La pequeña también sufrió maltrato de parte de Karla Magdalena y Rutilo, por el enojo que les provocó que su madre no regresó por ella, según dijeron a los oficiales que los detuvieron.
La pareja fue trasladada ante el agente del Ministerio Público donde se inició una carpeta de investigación por el crimen de la niña.
Los restos de la víctima fueron llevados al Servicio Médico Forense donde se harán las pruebas periciales que determinen las causas de su muerte.