Durante un operativo realizado en la provincia costera de Guayas (suroeste) fueron allanadas casas y oficinas de magistrados, de un ex diputado y de una ex presidenta de la Corte local de Justicia, señaló el ente acusador en la red social X.
El denominado caso Purga surgió de una gran indagación llamada Metástasis, revelada en diciembre y descrita por la Fiscal General Diana Salazar como la piedra angular de la «narcopolítica» en Ecuador.
Jueces, políticos, fiscales, policías, un ex director de la autoridad penitenciaria y muchos otros miembros de altas esferas del poder están acusados de beneficiar a organizaciones criminales a cambio de dinero, oro, apartamentos y otros lujos.
Entre los indicios hallados en la vivienda del ex legislador hay dos armas de fuego, relojes Rolex, licores, joyas, documentos, 7 mil 535 dólares y 505 euros, señaló la Fiscalía.
El caso Purga «le da continuidad a la depuración que requiere el país en este momento», dijo Salazar en un video divulgado por la Fiscalía, añadiendo que «continuamos trabajando en esta limpieza de las instituciones del Estado».
«Contamos con elementos que evidencian la necesidad de sanear el sistema judicial para librarnos de la corrupción y de la profunda descomposición estructural de la que hemos sido testigos estos últimos meses», expresó.
Salazar indicó que sobre los detenidos recaen sospechas de que han permitido que la política legislativa, la justicia y el narcotráfico trabajen de la mano.
Ante una violenta arremetida de bandas del narco con nexos con cárteles de México y Colombia, el Presidente Daniel Noboa declaró a la nación en «conflicto armado interno» y tildó de «terroristas» y «beligerantes» a una veintena de organizaciones criminales.
Desde entonces, unas 65 toneladas de drogas han sido decomisadas en Ecuador, ubicado entre Colombia y Perú, los principales productores mundiales de coca.
En agosto fue asesinado el candidato presidencial Fernando Villavicencio, un periodista de investigación que había destapado varios escándalos de corrupción que salpicó a altas autoridades gubernamentales.
Villavicencio había denunciado días antes que fue amenazado por Adolfo ‘Fito’ Macías, jefe de una de las principales agrupaciones criminales del país que en enero se fugó de una cárcel de Guayaquil (capital de Guayas) en la que cumplía 34 años de prisión por delincuencia organizada, narcotráfico y asesinato. El mafioso aún no ha sido recapturado.