En el marco del aniversario número 18 de haber sido implementado el grupo DARE (Educación para Resistir el Uso de las Drogas y la Violencia), por sus siglas en inglés, de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, agentes adscritos al mismo, narran sus experiencias después de trabajar por tantos años con niñas y niños en las diferentes escuelas de la ciudad y a su vez invitan a otras a sumarse a este importante enseñanza.
El programa preventivo DARE surgió en la ciudad de Los Ángeles, California en el año 1983 y fue implementado en el municipio de Chihuahua el 27 de marzo del 2006, con el objetivo de inhibir el consumo de tabaco, alcohol, drogas, así como la erradicación de la violencia entre los alumnos de las escuelas de nivel básico.
En sus inicios, el loable programa arrancó con 22 elementos policiales, con unidades prestadas de los turnos nocturnos que salían de servicio y, en septiembre de ese mismo año, se graduó la segunda generación de 15 instructores, a quienes les otorgaron ocho patrullas propias, llegando en una primera etapa a 120 escuelas y a 9600 alumnos de la ciudad y de comunidades rurales como El Sauz, Nuevo Delicias, El Charco y otras.
Es a través de 29 sencillas, pero valiosas lecciones impartidas por los propios agentes, como concientizan a los alumnos, maestros y padres de familia, sobre la importancia de conducirse con rectitud, así como evitar cualquier tipo de consumo de sustancias tóxicas y acciones violentas, principales generadores de conductas antisociales en jóvenes y adultos.
Temas como el bullying escolar, riesgos y consecuencias del uso de drogas, violencia en el noviazgo, así como saber qué hacer ante la presencia de extraños, manejo del estrés, leyes y reglas básicas de convivencia y el uso correcto del número de emergencias 9-1-1, son parte de la enseñanza que adquieren al ingresar a las ponencias.
Por otra parte, los elementos les inculcan valores y un sentido de pertenencia social y cívica, cultura vial, la manera de convertirse en buenos ciudadanos, el correcto manejo de conflictos y la toma de responsabilidades ante ciertas decisiones, entre otros.
Para seguir preparándose en beneficio de los alumnos que atienden, los elementos con que actualmente cuenta el grupo, han sido invitados a congresos nacionales e internacionales en lugares como: Nueva Orleans, Texas, Ohio, así como la Ciudad de México, Hermosillo, Mérida y Puerto Vallarta, donde comparten métodos, experiencias y conocimientos con otros instructores y ponentes de renombre.
Policía de academia, Armando Ríos Bojórquez
“Llevo 19 años trabajando como policía municipal y 17 como instructor DARE en todos los niveles escolares. He recibido muchas satisfacciones a lo largo de este tiempo, pues trabajar con niñas y niños es sumamente gratificante, te demuestran su cariño e interés y eso me anima a seguir ensenándolos.
Algunos jóvenes me han abordado en la calle o en eventos públicos para agradecerme las clases que hace años les di cuando eran pequeños y quienes ahora se encuentran cursando una carrera o ya la terminaron, y eso me llena de felicidad, saber que siguieron el buen camino y que contribuí en parte a ello”.
Policía de academia, Alfonso Morales.
“He pertenecido a la Policía Municipal desde hace 21 años y más de una década como agente DARE, lo cual creo, ha sido una de mis mejores etapas como policía, pues estoy seguro que nuestra enseñanza ha marcado a muchos de los estudiantes para llevar una vida recta y libre de sustancias nocivas.
Algo bueno dejamos en sus corazones y en sus memorias para que digan no a estos factores dañinos cuando crezcan y se les presenten estas situaciones, por ello continúo con la misma energía que tenía desde el primer día, pues si logramos hacer que dos o tres adolescentes se conviertan en personas honorables, hemos logrado mucho”.