Esta mañana, hubo un terremoto de magnitud de 6.1 en el sudeste de Afganistán, hasta el momento, el número de muertes es de más de mil 500 personas y más de dos mil heridos por dicho suceso.
Los servicios de emergencias intentan rescatar a las personas atrapadas en las aldeas que rodean las montañas, hasta ahora van alrededor de mil 500 muertos y dos mil heridos, aunque la cifra aumenta a cada momento.
“La gente cava tumba tras tumba, hay pánico y caos. Todos quieren saber sobre el paradero de sus familiares, amigos y miembros de la comunidad. No hay una autoridad que pueda proporcionarles información», dijo Haji Baqi, un trabajador comunitario en el lugar afectado.
El líder talibán Hibatullah Akhunszada señaló que cientos de viviendas quedaron destruidas, ya que en las áreas rurales son inestables o están mal construidas. A esto también atribuyen que existan tantas víctimas del terremoto.
“No hay trabajadores humanitarios oficiales. Pero la gente de las ciudades y pueblos vecinos está ayudando. Llegué esta mañana y yo mismo encontré 40 cadáveres. La mayoría son niños pequeños. Hay un hospital, pero no puede lidiar con este desastre. No tiene la capacidad”, comentó un granjero del equipo de rescate de la aldea Gyan, una de las más devastadas.