Durante su mañanera, la Mandataria manifestó su solidaridad con el ex Presidente de Bolivia y pidió que prevalezca la paz, ante el atentado ocurrido en Cochabamba.
«Por supuesto que lo condenamos, nuestra solidaridad con Evo Morales y siempre un llamado a evitar la violencia, siempre, que sea la paz y la definición política, la política está para eso, para evitar la violencia.
«Entonces nuestra condena a este hecho y también nuestra solidaridad y siempre la búsqueda de la paz y la no violencia», reiteró al ser cuestionada por el caso desde Palacio Nacional.
Ayer por la mañana, Morales acusó que el vehículo en que se transportaba con al menos tres acompañantes fue balaceado por hombres encapuchados, supuestos militares y policías como «agentes del Estado».
El líder izquierdista atribuyó el plan para matarlo a su rival político, el actual Presidente Luis Arce, quien ordenó una investigación minuciosa para esclarecer los hechos.
Según el Movimiento Al Socialismo (MAS) de Morales, un primer vehículo de su convoy, en el que se trasladaba a su programa semanal de radio en la región cocalera del Chapare, fue alcanzado por cuatro disparos.
Ello llevó al ex Mandatario a cambiarse «precipitadamente» de unidad, la cual fue impactada por 14 balazos más.
En el «intento de magnicidio», de acuerdo con la versión del ex Presidente, resultó herido su chofer con un aparente rozón en la parte posterior de la cabeza que no pone en riesgo su vida.
Ayer, otros líderes morenistas como Citlalli Hernández, titular de la Secretaría de las Mujeres, y Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, también condenaron el intento de asesinato contra Evo Morales.