El objetivo es, según informan, el de concientizar sobre las “catastróficas consecuencias” de un conflicto de este calibre.
Mediante un video, titulado “plan A”, los investigadores evalúan las posturas actuales de los países con respecto al uso de armamento nuclear, los posibles planes de guerra y los que serían los principales objetivos luego de desatarse el conflicto.
Los resultados que arroja el estudio son desoladores: 90 millones de muertos en las primeras horas, según calculan las muertes aumentarían exponencialmente luego por el colapso de los sistemas de salud, lluvia radioactiva, etc.
Pese a que de momento no es necesario alarmarse de manera desproporcionada por el riesgo de una guerra nuclear, los investigadores señalan que “ cuando se cruza este límite nuclear, es difícil evitar que se escale a una guerra total”.