«El nivel del crimen en las ciudades fronterizas estadounidenses es más bajo aún cuando las ciudades mexicanas hermanas se cuentan entre las más peligrosas de América del Norte», afirma un análisis de la plataforma Axios que se sustenta en las estadísticas del FBI correspondientes a 2019.
El análisis sobre los datos de criminalidad en 11 comunidades fronterizas encontró que esas ciudades tenían una tasa combinada de crímenes violentos de 338.5 por cada 100 mil residentes, comparada con una de 366.7/100 mil a nivel nacional en el mismo período.
En su informe anual ante el Congreso en 2019, el Presidente Donald Trump afirmó que «la ausencia de la ley en nuestra frontera sur es una amenaza para el orden público, la seguridad y el bienestar financiero de todos los estadounidenses».
Sin embargo, el informe de Axios apunta a que hay poca evidencia de ello.
«Desde Brownsville en Texas, a San Diego en California, las ciudades fronterizas seguras tienen poblaciones de mayoría hispana y tasas de pobreza por encima del promedio nacional», apunta.
El artículo sostuvo que las ciudades de Memphis (Tennessee), Dallas (Texas), Lima (Ohio), Kansas City (Kansas), St. Petersburg (Florida), Erie (Pennsylvania), Sioux Fall (Dakota del Sur), y Covington (Kentucky), todas ellas lejos de la frontera con México, tienen tasas de crimen contra la propiedad y crimen violento más altas que ocho ciudades fronterizas.
Para la comparación, Axios observó las estadísticas de delitos contra la propiedad y crimen violento en Brownsville, El Paso, Laredo y Del Rio (Texas), Yuma (Arizona) y San Diego y Calexico (California).
El artículo puso como ejemplo la ciudad de McAllen, en Texas, con 145 mil habitantes y una tasa de crimen violento de 96.6/100 mil mientras que Kansas City, con 153 mil habitantes tuvo una tasa de crimen violento de 707.5/100 mil, según la Oficina de Investigación de Kansas.
«Todos nos desprecian como una pequeña ciudad polvorienta en la frontera y los medios muestran imágenes del muro y los centros de detención», dijo el alcalde de McAllen, Jim Darling, citado por Axios. «Ésa no es toda la realidad».
El artículo también citó al alcalde de Nogales (Arizona), Arturo Garino, un oficial de policía retirado y veterano de la guerra de Vietnam según el cual «aquí siempre ha habido seguridad: dejamos nuestras puertas sin pasador en la noche, no nos preocupan las invasiones de hogares o los tiroteos, como allá en el norte».
Por otra parte, Axios indicó que el incremento de la presencia de agencias policiales federales registrado en la región fronteriza a lo largo de las dos últimas décadas «puede haber desempeñado un papel en la reducción del crimen».
Las agencias federales son uno de los mayores empleadores en las ciudades fronterizas y, según la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP, en inglés), los latinos conforman el 33 por ciento de sus 63 mil 900 empleados.