Se dio a conocer que el cierre de la Unidad de Medicina Familiar número siete, fue ordenado por las autoridades de salud.
Habitantes de esa comunidad dieron a conocer que el cierre de la clínica se debió a que los médicos que prestan servicio tienen miedo por la inseguridad, pues temen ser víctimas de un ataque o levantón por parte de los integrantes de los grupos delictivos.
Supuestamente los trabajadores de la clínica recibieron ayer en la mañana una llamada en la que les informaban que la clínica se había cerrado por tiempo indefinido.
Ante el cierre de la unidad de medicina, cientos de derechohabientes se quedaron sin servicio.
Por el momento el IMSS no ha emitido algún informe oficial al respecto.