«A las 4 de la mañana nos informan que se querían llevar a dos compañeros de la policía comunitaria, pero nos organizamos y afortunadamente logramos rescatarlos», dijo en conferencia de prensa Julio César Almazán Castro, comisario municipal de El Ocotito, junto con líderes de las autodefensas.
Almazán Castro mencionó que ignora las razones por las que el Ejército intentó llevar a cabo esta supuesta detención.
Desde ayer, los habitantes tenían planeado marchar a la salida de la comunidad para dialogar con los soldados y elementos de la Guardia Nacional-
«Estamos viviendo un clima de hostigamiento e intimidación por parte del Ejército y Guardia Nacional», denunció.
El comisario aseguró que no tenía planeado hacer ninguna protesta en donde las fuerzas federales tienen instalado su retén de seguridad.
Sin embargo, al percatarse de la detención, se ordenó el cierre de escuelas y comercios.
«No pedimos que se vaya el Ejército, que haga su trabajo, pero de la mejor manera sin hostigar a nuestra gente», expresó el comisario.
Mencionó que estas presuntas intimidaciones y actos hostigamiento contra los habitantes de El Ocotito por parte de las fuerzas armadas, es en represalia tras el anuncio de que la policía comunitaria entrará de nuevo en operaciones.
«La policía comunitaria no va a utilizar armamento de uso exclusivo del Ejército, eso le dijimos al mando militar que está al frente del retén de seguridad», aseguró Almazán Castro.
Transportistas de la ruta Chilpancingo- El Ocotito dieron a conocer la suspensión del servicio ante el anuncio del supuesto cierre de la carretera federal.
«Nosotros nunca planeamos cerrar la carretera, lo que sí pedimos a los dueños de los negocios que cerraran y a los directores de las escuelas suspendieran las actividades académicas», afirmó el comisario.
En un recorrido que se realizó por las calles de la comunidad, que está a 30 minutos de Chilpancingo, se observó decenas de comercios cerrados, al igual que varias escuelas de educación primaria, preescolar y secundaria.
El desmantelamiento de la policía comunitaria vinculada a la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en El Ocotito, se aceleró en febrero de este año a raíz de la detención de su líder Deivy Barrientos, en el estado de Puebla, acusado de delitos del fuero federal.
Sin embargo, en Guerrero, Barrientos también cuenta con una carpeta de investigación abierta por la autoría intelectual del homicidio del periodista Fredi Román Román, ocurrida en agosto del 2022 en Chilpancingo.
En al menos dos ocasiones, habitantes de El Ocotito y seguidores de Barrientos han realizado protestas en Chilpancingo para exigir a las autoridades su liberación.