Esto ocurrió el anterior miércoles y a pesar de que los delfines fueron asistidos por voluntarios, incluidos algunos turistas, muchos de los ejemplares devueltos al mar volvieron a varar.
Los científicos han tomado muestras de los delfines muertos y esperan poder esclarecer el caso cuando haya resultados.
La fundación Loro Parque, participó a través de entidades colaboradores en el auxilio de los cetáceos, ha explicado que el varamiento masivo afectó a 132 delfines, que aunque eran devueltos al mar, de nuevo volvían a varar.
Javier Almunia, director de Loro Parque explicó ante la agencia EFE que es difícil concretar los motivos de ese comportamiento colectivo, pero cree que es posible que tengan que ver con la ruta elegida por el animal líder.
Aunque todavía quedan algunos ejemplares vivos, se teme que finalmente acabarán muriendo.
Además Loro Parque destaca que lo peor de este incidente, es que se ha repetido en varias ocasiones y que evidencia la necesidad de colaborar en la zona de la Macaronesia para proteger a la enorme diversidad de cetáceos que habita en la región.