De acuerdo con Sotelo, se trata de un modo de protesta del Gobierno del Estado de Texas en contra de la ola de personas en contexto de movilidad que han llegado a territorio estadounidense para buscar asilo, que el gobierno norteamericano acepta a través de algunas puertas del muro fronterizo entre esta localidad y El Paso.
Estas medidas incluyen revisiones exhaustivas por parte del Departamento de Seguridad Pública del Estado de Texas, explicó el líder transportista, a las cargas que llegan a El Paso por los puentes Libres y Zaragoza, aunque los sábados únicamente abre este último.
Se trata de la cuarta crisis que enfrenta el sector en los cruces internacionales en los últimos cinco años, recordó el líder transportista, luego de las ocurridas en 2019, 2021 y 2023, todas, como esta, resultado de conflictos políticos por el cruce de personas migrantes de México y otras partes de Latinoamérica.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos reporta entre tres y cuatro horas de espera en seis carriles abiertos para revisión de vehículos comerciales con corte de información a las 9:00 de la mañana por parte de la dependencia.
A las 8:00 de la mañana, el tiempo de espera era de 90 a 120 minutos en siete carriles abiertos y a las 7:00 la demora era de entre 35 y 55 minutos de espera en seis carriles.
En un recorrido por la zona, El Diario observó una fila de cerca de un kilómetro pasados los patios fiscales donde se revisan las cargas del lado mexicano previo al cruce. La línea de camiones abarca la prolongación de la avenida Manuel J. Clouthier entre la calle Manuel Sandoval y la avenida Clara Fuentes.