Hasta ayer, y ante la falta de lluvias generalizadas en la región, la presa “La Boquilla”, que es la de mayor capacidad en la entidad, presenta un 54.8 por ciento de almacenamiento.
La presa Francisco I. Madero se encontraba en un 60.1 por ciento, mientras que la Luis L. León, mejor conocida como “El Granero” reportaba un un 83.8 por ciento de su almacenamiento.
Asimismo, se informó que la presa conocida como “Abraham González” estaba a un 54.2 por ciento; las “Las Lajas” estaba a un 49.4 por ciento y “El Tintero” a un 34.6 por ciento.
En cuanto a las presas de la capital, la “Chihuahua” presentaba un 61.2 por ciento de su capacidad y “El Rejón” estaba en un 86.9 por ciento.
La San Gabriel se encontraba a un 71.7 por ciento y la presa Pico del Águila registraba un 69 por ciento de volumen de almacenamiento.
De acuerdo con la dependencia federal, se espera que una vez que ingrese la temporada de lluvias a la entidad, pueda mejorar los volúmenes de captación.
Cabe mencionar que al mismo periodo de tiempo pero del año pasado, las presas estaban al 23 por ciento y en el año 2021 a un 24.1 por ciento. El monitoreo de las presas de la entidad se ha vuelto ua prioridad para el gobierno estatal, ya que tras la celebracion de una de las sesiones del consejo de Cuenca en Nuevo León, representantes de Tamaulipas, Coahuila y Nuevo León, votaron a favor de extraer agua de las presas de Chihuahua para suministrar el 54 por ciento de la demanda de líquido que tienen estas entidades, basadas en un modelo matemático que formularon con datos de hace 15 años.
Ante esto la gobernadora Maru Campos Galván ya advirtió sobre la generación de un nuevo conflicto social como el que sucedió en 2020 y también fue enfática con las autoridades federales de que no permitirán extracciones ilegales de agua del estado.
En su momento, dijo la mandataria, trató el tema con el entonces secretario de Gobernación Adán Augusto López, así como con el entonces canciller Marcelo Ebrard, por lo que indicó que, “sobre aviso, no hay engaño”.
La gobernadora expuso que habrán de defender el agua de Chihuahua y no permitirán la extracción del recurso, pues primero tienen que solventar las necesidades de los chihuahuenses.
No obstante, la Conagua ha reiterado que, hasta el momento no hay instrucciones para algún trasvase de líquido hacia otras entidades y tampoco hay definición sobre el volúmen que pudiera tomarse de las presas de Chihuahua.