Entre enero y junio de 2019 se iniciaron 448 carpetas de investigación por ese delito, 38 más que en el mismo periodo del año pasado, lo que representa un aumento de 9.2 por ciento.
El estado que durante el primer semestre del año sumó la mayor cantidad de carpetas por feminicidio fue Veracruz, con 98 casos.
Esta entidad, gobernada por el morenista Cuitláhuac García, acumuló el 21.8 por ciento del total de casos registrados en el País en seis meses.
Le siguieron el Estado de México, con 42 indagatorias iniciadas; Puebla, con 29; Chihuahua y Nuevo León, con 24 cada entidad; y Sonora, con 22.
Sólo Baja California Sur no ha reportado casos ante el secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
El plan «plan emergente» para proteger a las mujeres y las niñas fue presentado el pasado 6 de marzo por la Secretaría de Gobernación y el Instituto Nacional de las Mujeres.
«El plan tiene objetivos muy claros: asumir como un problema de Estado la prevención, atención, sanción y erradicación de la violencia contra las mujeres y las niñas», se señaló en su presentación.
Como parte del plan, el Gobierno alista un paquete de iniciativas para mejorar el combate a la violencia de género, que incluye la homologación de la tipificación del delito de feminicidio.
Además, de 2015 a la fecha se han emitido 18 alertas de género para mismo número de entidades, sin que se haya podido contener la violencia feminicida.
REFORMA publicó ayer que en 7 de los 11 municipios mexiquenses donde se decretó Alerta de Género desde 2015, los feminicidios han aumentado.
Por ejemplo, Ecatepec pasó de 7 a 13 casos; Chimalhuacán subió de 5 a 9, y Nezahualcóyotl, que tenía 3, llegó a 9 eventos.
La muerte violenta de mujeres por razones de género está tipificada como feminicidio a nivel estatal y federal, y es considerada la forma más extrema de violencia contra la mujer.
Cifras oficiales indican que en junio se iniciaron 77 indagatorias por feminicidio, 2 más que en mayo, lo que significó un aumento de 4 por ciento.