«La participación de la mujer en la sociedad es tan minúscula que un escote puede quedar enorme. Voy a seguir vistiendo lo que quiero. No pretendo violarme para agradar a nadie», afirmó la diputada Paulinha, como es conocida entre su electorado.
La legisladora del estado de Santa Catarina ocasionó un escándalo en el país al presentarse a una ceremonio oficial con un vestido rojo profundamente escotado.
Su vestimenta en la ceremonia del 1 de febrero provocó una tormenta en las redes sociales.
Sus detractores, entre ellos muchas mujeres, sostienen que fue “inapropiada”, “escandalosa” y “vulgar”. Otros dicen que la vestimenta no tiene importancia y que los políticos deben concentrarse en asuntos más importantes.
Las críticas fueron tan grandes que la propia Asamblea Legislativa de Santa Catarina emitió una nota oficial repudiando los comentarios misóginos.
«Reforzamos que este tipo de visión no cabe más en una sociedad diversa, donde todo ciudadano tiene el derecho de expresarse. Y que el ataque a cualquier parlamentario es también un ataque al Parlamento y, por consiguiente, a la democracia «, puntualizaron.
Información de Excélsior