La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA, por sus siglas en inglés) indicó que les llegó la llamada “viruela del mono”, un tipo de viruela endémica detectada en África y relacionada con los primates.
El primer caso lo confirmaron el 6 de mayo en Inglaterra. Luego identificaron dos más: uno en Londres y otros en el sureste de Inglaterra.
Las autoridades británicas sospechan que sería una enfermedad de transmisión sexual por los tres casos detectados hasta ahora. Aunque también suponen que se transmite a través de la piel y contacto cercano con cosas de los infectados.
Los síntomas que advierte son ámpulas (granitos), sarpullidos y otras lesiones en la piel.
Esta enfermedad la habían detectado en el oeste de África, por lo cual hay advertencia de viaje desde hace tiempo.
Detectada en España y Portugal.
Ante la alerta de Reino Unido, las autoridades sanitarias de países europeos comenzaron monitoreo epidemiológico y Portugal confirmó cinco casos de la viruela, además de que investiga “más de 20 casos sospechosos”.
“Los casos, la mayoría son jóvenes, todos de sexo masculino. Presentan lesiones ulcerosas”, dijo la Dirección General de Salud de Portugal en comunicado.
El Ministerio de Sanidad de España indicó temprano que tenían ocho casos sospechosos, pero más adelante las autoridades locales de Madrid -la capital del país- encontraron que tan sólo en la ciudad hay 23 casos sospechosos.
No es la primera vez que circula una ola de casos de esta viruela. En el año 2003 contagió a por lo menos 70 personas en Estados Unidos.
La vacuna de la viruela original reduce los casos graves contra la viruela del mono, según los reportes pasados de autoridades de salud.
Fernando Simón, titular de Emergencias Sanitarias de España, consideró que no parece que vaya a ocurrir una transmisión intensa de la enfermedad en el país, pero se mantienen en alerta. “Estamos trabajando con todas las hipótesis posibles y cuando tengamos información un poco más sólida ya se explicará y se darán los datos necesarios”, dijo.
La letalidad varía entre el 0 y once por ciento, aunque reportan que es más dañino en niños y jóvenes que no han sido vacunados nunca contra viruela humana.