«El asesinato capital es el cargo más alto en el estado de Texas y se castiga con la muerte o con cadena perpetua sin libertad condicional si se lo encuentra culpable. El fiscal de distrito Jaime Esparza buscará la pena de muerte», señaló la fiscalía del distrito 34 a través de un comunicado.
Por su parte, Mark Stevens, abogado del joven de 21 años que permanece encarcelado sin derecho a fianza, informó anteriormente que usará todas las herramientas legales disponibles para evitar la ejecución.
Crusius se entregó a la Policía luego del tiroteo que provocó el pasado 3 de agosto en respuesta a lo que consideró «una invasión hispana» a Texas.