Cdmx.- La corriente Democracia Interna del PRI pidió la expulsión del ex presidente Enrique Peña Nieto argumentando que durante su administración el partido tuvo una debacle y desprestigio sin precedentes llevándolos a su peor derrota electoral en la historia.
«En contraste y en sentido contrario a las demandas de la militancia, se propuso a Enrique Peña Nieto como consejero político nacional. Que quede claro, Peña no sólo no puede ser consejero político, sino que debe ser expulsado del partido por el inmenso daño que le causó llevándolo del triunfo del 2012 a la peor derrota en su historia en el 2018», se lee en una carta enviada a la líder nacional, Claudia Ruiz Massieu y que es firmada por los Consejeros Políticos Nacionales.
Democracia Interna afirmó que tras la sesión del Consejo Político en la que se determinó abrir el proceso de selección para elegir dirigente nacional, se tomó también la determinación de hacer la solicitud de expulsión del ex presidente Peña, a quien señalaron de tener injerencia directa las decisiones del partido.
«Una y otra vez se ha señalado el desprestigio que le ocasionaron al PRI la corrupción de destacados militantes como el propio Peña, algunos miembros de su gabinete y los gobernadores cuyas candidaturas impulsó él; unos hoy encarcelados, algún otro prófugo y otros más aún al frente de sus entidades. El «primer priista», nadie lo duda, tuvo mano en las decisiones del partido en los seis largos años de su gobierno».
Democracia Interna responsabilizó directamente a Peña Nieto por la derrota electoral de 2018, pues gracias a su actitud pasiva, el PRI alcanzó una debacle histórica sin precedentes.
«Los reclamos sociales por la seguridad, por la pobreza y la desigualdad, sumados a la corrupción, llevaron al gobierno a los niveles más bajos de desaprobación de que se tenga registro en la historia reciente de México y, gracias a la actitud pasiva de las dirigencias priistas ante el actuar de sus gobiernos, esta desaprobación se le trasladó al partido llevando a ser sinónimo priista y corrupto. «El malestar social», como lo llamó en su momento Peña, se expresó con claridad en las urnas».
Información de Milenio