Además, el Kremlin informó que presidente ruso Vladimir Putin expresó su respaldo a su homónimo de Venezuela, Nicolás Maduro, en una conversación telefónica el jueves.
Putin declaró que él apoyaba un «diálogo pacífico» con el fin de encontrar soluciones a las diferencias en Venezuela.
El miércoles, el líder de la oposición venezolana Juan Guaidó se autoproclamó presidente interino y obtuvo el reconocimiento de Washington, lo que llevó a Maduro a romper relaciones diplomáticas con Estados Unidos.
La perspectiva de un derrocamiento de Maduro es un dolor de cabeza geopolítico y económico para Rusia que, junto a China, se ha convertido en un prestamista de último recurso para Caracas, a quien ha entregado miles de millones de dólares en medio de la gran crisis que vive su economía. Moscú también ha prestado apoyo a su industria militar y petrolera.
Rusia acusó a Washington de estar detrás de las protestas callejeras y de intentar minar a Maduro, a quien calificó como el presidente legítimo del país.
«Consideramos que el intento de usurpar la autoridad soberana en Venezuelacontradice y viola la base y principios de la ley internacional», dijo este jueves el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Asimismo, indicó que Rusia no ha recibido solicitud de ayuda militar por parte de Venezuela, al tiempo que declinó especificar cuál sería su respuesta si lo hiciera. Maduro, que se reunió con su par ruso, Vladimir Putin, en Moscú en diciembre, es el presidente legítimo, afirmó Peskov.
En tanto, la cancillería rusa pidió a Washington que no intervenga militarmente, advirtiendo que la interferencia exterior abre el camino a un baño de sangre. «Advertimos contra estas aventuras, que pueden tener consecuencias catastróficas», señaló.
Información de elfinanciero.com.mx