El objetivo de Cemex es usar el producto para capturar CO2 de la biomasa para almacenarlo y producir combustibles sostenibles para la aviación.
«La planta de biochar, llamada ALCE, será la primera de su tipo en Europa en términos de tamaño, capacidad y ubicación estratégica en la planta de cemento de Cemex en Rüdersdorf», dijo la compañía en un comunicado.
Presente en Europa, África, Medio Oriente y Asia, Cemex cuenta con una red de comercio global que abarca casi 100 países, mientras que ALBA es un líder europeo en la prestación de servicios ambientales que se especializa en el reciclaje de papel, vidrio, plásticos, biomasa, acero y metales.