La Comisión Nacional del Agua emitió el reporte de las presas con las mediciones del sábado, en el que precisó que la presa Las Vírgenes, la cual es la segunda más grande del estado tenía apenas el 15.8 por ciento de su capacidad, lo que es un nivel más bajo al que se tenía en 2022, cuando estaba al 34.4 por ciento. Las presas no pueden quedar vacías, debido a que debe permanecer entre un 10 y un 15 por ciento del agua para no afectar de manera severa a la fauna y flora de la región, además de que afectaría su integridad estructural.
La Boquilla, la cual es la más importante del estado y que es referencia de la situación de las presas estaría llegan al 20 por ciento o menos, ya que en el reporte emitido ayer fue precisado que estaba a un 20.2 por ciento.
Hasta ahora las precipitaciones en la zona serrana no se reflejan en un aumento en las presas, pero han servido para que concluya la primera etapa de la temporada de incendios forestales y algunos de los arroyos y ríos han aumentado su caudal.