Familiares de los pacientes denunciaron que varios enfermos viajaron desde Parral a recibir quimioterapia y no fueron atendidos por especialistas
Parral.- El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en Chihuahua, se quedó repentinamente sin oncólogo, y nadie notificó a los pacientes que tenían programada su cita para recibir la quimioterapia respectiva, por lo que, al llegar al hospital Lázaro Cárdenas pacientes de la ciudad de Parral, encontraron el área vacía, jamas les notificaron y a parte de acudir con los terribles efectos del cáncer se toparon con la terrible sorpresa.
Familiares de los usuarios se mostraron sorprendidos de observar que nadie recibía su tratamiento contra el cáncer, por lo que cuestionaron al personal, mismos que, únicamente atinó a responder que «el Doctor Zamudio ya no trabaja en el ISSSTE.»
Lamentaron que nadie notificó a los derechohabientes, mismos que, por su condición, podría dependerles la vida de la oportuna aplicación de una quimioterapia y que incluso algunos de ellos viajaron de otras ciudades, entre ellas de Parral, ya que en las clínicas locales no existen estos tipos de tratamientos.
Al preguntar dónde se encontraba el doctor, el personal insistió en que ya no trabajaba en la clínica y que podían acudir a la Coordinación del área respectiva, pero la sorpresa fue mayúscula cuando, quienes fueron a buscar a la coordinadora, les dijeron que el y el otro oncólogo ya habían renunciado.
Antes de recibir el tratamiento contra el cáncer, el médico oncólogo debe revisar el diagnóstico y expediente de cada paciente, para determinar la dosis, pero este martes 12 de junio, no había nadie que atendiera, ni resolviera ni explicara qué estaba sucediendo, más allá de «el Dr. Zamudio ya no trabaja aquí.»
Familiares y pacientes exigieron a las autoridades médicas una respuesta a tan grave situación ya que depende la vida de los tratamientos y no existen ninguna atención, mucho menos un comunicado para no viajar hasta la clínica.
Esta denuncia fue en contra del Hospital «General Presidente Lázaro Cardenas,» ubicado en Avenida de Las Américas y Ángel Trías en Chihuahua, Chihuahua, donde decenas de enfermos de cáncer se tuvieron que devolver a sus lugares de origen por carretera sin recibir su quimioterapia.