Publicó CNN artículo recopilando declaraciones de expertos, de autoridades, cifras y los anuncios de llegadas de empresas importantes de Estados Unidos a México por la guerra comercial del gigante norteamericano con China, lo cual ahora también provoca el arribo de compañías de la potencia asiática.
Explica el nearshoring (relocalización de empresas) y lo resume en que Estados Unidos está desmontando las cadenas de suministro que tenía en China para instalarlas en México.
“El sector manufacturero de México está emergiendo como el ganador” porque tiene muchos atractivos para las empresas, continúa el artículo de John Towfighi, sobre cómo están aprovechando el T-MEC, la mano de obra y la vecindad entre los países.
Un dato central es que México rebasó a China como el principal exportador hacia Estados Unidos.
Pero desde el Gobierno de Estados Unidos notan algo, y es que a medida que bajan sus importaciones de bienes de China a raíz de los aranceles impuestos por la guerra comercial entre las dos mayores potencias económicas, el país asiático al mismo tiempo ha logrado subir lo que exporta a México.
Esto es visto por el Gobierno de Estados Unidos como un intento de China para esquivar los aranceles, pues logran los asiáticos vender acero, aluminio y otros productos estratégicos a México que luego terminan formando parte de productos que las empresas en suelo mexicano envían libremente a los EE.UU. gracias al T-MEC.
Esquivan el bloqueo.
China tendría en México su mejor herramienta para evadir el bloqueo para seguir entrando de manera indirecta al mercado estadounidense y reafirmarse como una de las potencias del planeta.
Según Xeneta, que revisó estadísticas sobre contenedores de barcos comerciales, los productos importados por México provenientes de China crecieron un 60% en enero del 2024 comparado con el año anterior.
Peter Sand, jefe analista de Xeneta, comentó que el incremento de importaciones chinas en México sugiere que “el aumento del comercio que estamos atestiguando se debe a que los importadores tratan de esquivar los aranceles de Estados Unidos”.
Además México está trayendo más bienes del extranjero para su producción industrial. Así lo expusieron los analistas de riesgo de S&P, José Enrique Sevilla y John Raines.
El aumento de las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos “está casi emparentada simultáneamente y muy estrechamente correlacionada con el incremento de las importaciones mexicanas provenientes de China”.
México subió sus aranceles a productos chinos.
Hace siete días el Gobierno de México emitió el decreto que aumenta las cuotas de aranceles para importaciones de múltiples productos. Destaca un fuerte cobro del 50% para algunos productos de aluminio y acero.
Aunque no están específicamente aplicados para China, son para todos los países con los que no tiene México un tratado de libre comercio, así que terminan los aranceles por reflejarse más que nada en las importaciones chinas.
Esto ocurre después de la visita de Katherine Tai, representante comercial de EE.UU., a México para reunirse con la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, donde la funcionaria del gobierno de Joe Biden manifestó las preocupaciones que tienen por el acero y aluminio chinos que entran sin ser reportados.
El nearshoring.
Estados del norte de México son los que más está notando el arribo de industrias por el nearshoring.
Analistas destacan en especial Monterrey y el estado de Nuevo León, donde estará la nueva gigafábrica (gigafactory) de Tesla, en Santa Caterina, camino hacia Saltillo, otras de las ciudades más beneficiadas por el nearshoring.
Pero no solo es que vaya a llegar una empresa estadounidense de tan alto calibre como Tesla, sino que está por instalarse uno de sus mayores competidores del mundo en territorio mexicano.
La empresa china BYD, que compite en el mercado de autos eléctricos con Tesla, anunció en febrero planes para una expansión en México que implicaría producir a gran escala, buscando China que pueda introducir sus autos al mercado de EE.UU.
Analistas de Morgan Stanley consideran que en los próximos cinco años las exportaciones de México a Estados Unidos pasarán de un valor de 455 mil millones de dólares a cerca de 609 mil millones de dólares, algo que sabe China y por lo que está invirtiendo en territorio mexicano.