En un comunicado publicado en su sitio oficial (consúltalo aquí), la organización señaló que los migrantes, procedentes de Ecuador, fueron víctimas de «un plan meticulosamente organizado».
«El lugar donde fueron retenidos servía como una casa de seguridad para diversos coyoteros de diferentes nacionalidades, quienes marcaban a los migrantes con sellos distintivos en sus brazos, según el grupo al que ‘pertenecían’. Se tomaban fotografías y se realizaban grabaciones diarias para mantener una vigilancia constante sobre ellos», señala el documento.
De acuerdo con la organización, «varios de los secuestrados, especialmente los ecuatorianos, llevaban más de un mes cautivos en este lugar, provenientes de diversas regiones de su país. Además de los 95 ecuatorianos, también se encontraban retenidos 10 migrantes de otras nacionalidades, incluyendo cubanos, haitianos y centro americanos».
Entras las personas extranjeras que presuntamente fueron víctimas de secuestro «se contabilizaban seis niños que estaban acompañados por sus familias».
A pesar de lo anterior, las autoridades no han atendido de forma expedita los reportes, denuncia 1800 migrante.
Flujo constante en la frontera
La frontera entre México y Centroamérica es testigo del constante flujo de personas migrantes. Apenas el 11 de abril, se reportó que un nuevo grupo de migrantes partió esa mañana desde Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Se informó que se trata de alrededor de 200 personas que buscan unirse a la caravana que partió un día antes con rumbo al norte del país.
Los migrantes decidieron formar una caravana para protegerse y evitar ser detenidos por las autoridades migratorias en su trayecto hacia el norte.
La mayoría de las personas que participan en caravana está son mujeres y niños, quienes tienen como objetivo llegar al norte del país cruzando Oaxaca, Veracruz, Puebla, Ciudad de México y otros estados del norteños, con la esperanza de conseguir el cruce a Estados Unidos.