El programa «La Clínica es Nuestra» busca empoderar a las comunidades locales para que tomen decisiones sobre el destino de los recursos destinados a mejorar la atención médica en sus regiones. Zoé Robledo Aburto detalló que se establecen transferencias a los comités de salud para el bienestar, que son conformados por la propia población de las áreas atendidas por los centros de salud.
«La población determina la integración de un comité de salud que atiende esa unidad y allí es donde se hace la transferencia para que puedan llevar a cabo la acción que se decida por parte de la comunidad», explicó Robledo Aburto. Estas acciones pueden incluir mejoras en la infraestructura, adquisición de equipamiento médico o soluciones para necesidades inmobiliarias urgentes.
El director general del IMSS destacó que el programa «La Clínica es Nuestra» se basa en la participación activa de la comunidad a través de asambleas, donde se crean los comités encargados de identificar las necesidades y ejercer los recursos del programa. Estos comités, conocidos como COSAVI, están integrados por un presidente, un secretario técnico, una tesorera y cinco vocales.
Robledo Aburto informó sobre el avance significativo en la implementación del programa, con la realización de capacitaciones para los servidores de la nación y la celebración de asambleas en todo el país. «Tenemos una meta de 8 mil 176 asambleas y hasta el día de ayer ya se han llevado a cabo 6 mil 134, llevamos un avance del 75%», destacó el funcionario.
El objetivo final de «La Clínica es Nuestra» es que las comunidades se apropien de la atención médica en sus regiones, identificando y priorizando las necesidades más urgentes para mejorar la calidad de vida de sus habitantes.