El dólar spot, referencia entre bancos, abrió operaciones este 2 de agosto en 17.01 pesos, lo que quiere decir que rompió el techo de los 17.
Cleofas Torres Rivera, analista financiero chihuahuense, destacó que la baja de la calificación crediticia de Fitch a las finanzas de los Estados Unidos de América le pegó al peso mexicano.
En tan solo cuatro días el tipo de cambio se fue de 16.50 como mínimo a incluso los 17.06 pesos que alcanzó a marcar por momentos en este día.
En la noche el dólar llegó a tocar mínimo de 16.84 y máximo de 17.02, por lo que se ha comportado volátil tras la baja de la calificación.
*Explica: “el peso se presiona a niveles de 16.90, cerrando la sesión anterior cercano al máximo, tras conocer los malos datos de PMI principalmente de Estados Unidos y China, los cuales dejan dudas de la economía para lo que resta de año. Aunado a ello, hacia el cierre de sesión, la agencia Fitch recortó la calificación crediticia a Estados Unidos de AAA a AA+, lo cual apoyó el sentimiento de aversión al riesgo y cautela en los mercados”.
Cuando los mercados suelen retroceder, el dólar sube a nivel internacional y eso tiene impacto directo en el peso mexicano que es una moneda atractiva para invertir cuando hay calma en el mercado.
Al abrir las bolsas en Wall Street se confirmó la afectación por la baja de la calificación y en consecuencia aceleró la depreciación del peso mexicano, quedando el dólar por encima de los 17.
Espera que opere en el día en un rango de 16.90 y 17.08 pesos.
Temblor financiero rebaja de la calificación de EE.UU.
El 1 de agosto informó Fitch Ratings que “ha bajado de ‘AAA’ (la más alta que hay) a ‘AA+’ la calificación crediticia a largo plazo en divisa extranjera de los Estados Unidos de América”.
El principal motivo es la deuda de Estados Unidos, que rebasó los 31.4 billones (‘trillions’ en inglés) de dólares
Detalla Fitch Ratings que «a rebaja de Estados Unidos refleja el deterioro fiscal esperado en los próximos tres años» y la «erosión de la gobernanza».
Esto a raíz de los impasses políticos en el Congreso de Estados Unidos pues el techo de la deuda se fija por ley y los legisladores tienen que aprobar un aumento en caso de requerirlo.