Comentó que en la mayoría de los últimos 15 ciclos agrícolas han sido aplicadas restricciones en el aprovechamiento del agua de las presas y que este año finalmente es posible tener una concesión mayor, pero en caso de que no llueva en las próximas semanas no habrá captación en las presas y el próximo año es posible prever que no habrá agua suficiente y serán aplicadas restricciones.
Dijo que las altas temperaturas aceleran la evaporación del líquido, además de que la filtración hacia el subsuelo es constante; puso el ejemplo de la presa La Boquilla, la cual cada año pierde en las filtraciones el volumen suficiente para llenar la presa Las Vírgenes.
La presa La Boquilla, en el municipio de San Francisco de Conchos, ha tenido una disminución significativa en el volumen de agua que tiene almacenado, esto debido a que desde abril fueron abiertas las compuertas para el ciclo agrícola de 2023, mientras que hasta ahora la captación por escurrimientos ha sido poco.
La presa La Boquilla representa alrededor del 80 por ciento del volumen que pueden captar las presas de la entidad en su totalidad, por lo que las variaciones que tiene impactan en el promedio en general de manera significativa.
El almacenamiento de la presa pasó de un 68.4 el primero de mayo, que se traduce en mil 948 millones de metros cúbicos, a un 62.9, que representa mil 789 millones, el primero de junio, según el reporte emitido por la Comisión Nacional del Agua.
En el reporte de la instancia federal de ayer de este mes la presa tenía mil 506 millones de metros cúbicos, lo que representa el 52.1 por ciento de su capacidad total
Expresó que aún pueden suscitarse precipitaciones que permitan una recuperación de las presas y mejoren las expectativas para el próximo año.