El año pasado, el Incifo recibió mil cuerpos de mujeres, de los cuales el Ministerio Público sólo relacionó el 4.2 por ciento con asesinatos por razones de género, pero los forenses encontraron señales de violencia característica de esos crímenes en 29.2 por ciento más casos.
«Encontramos 292 (cuerpos) con violencia que, de inicio, no venían clasificados como feminicidio, sino que aquí se obtuvieron más elementos para que posteriormente el Ministerio Público pueda, si es que tienen los elementos suficientes, reclasificar el caso», explicó Juventino Iván Miguel González, médico forense del Incifo.
Adriana Rubio, perito con perspectiva de género y asesora forense del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, dijo que las cifras del Incifo son alarmantes, pero podrían ser más altas.
Padecen al reclasificar muertes de mujeres como feminicidios
La falta de especialización de todo el aparato de investigación y de justicia capitalina, lamenta, contribuye a que se desestimen las razones de género.
Y esto ocurre a pesar de que existen protocolos y guías técnicas, pues lo que no se ha creado son cuerpos de trabajo que atiendan exclusivamente este tipo de delitos. Al Ministerio Público lo ubica como el eslabón más débil.
«No está investigando realmente las razones probables de género que pueden existir en la forma y no sólo en la causa de muerte», comentó Rubio.
«No sabe (el MP) interpretar los resultados de otras ciencias forenses y periciales para poder entender que lo que está viendo, aunque el Incifo estableciera una causa de muerte distinta a la que se esperaba o donde no se ven grandes señales de violencia, puede ser un feminicidio ese caso».
En el Incifo, los análisis se realizan siguiendo la Guía Técnica para la Realización de Necropsias en Casos de Feminicidio, que se implementó desde hace cinco años como parte de una recomendación de la Comisión de Derechos Humanos capitalina tras el feminicidio de Lesvy Berlín Osorio, ocurrido el 3 de mayo. Dicho crimen fue investigado al principio como suicidio.
Este protocolo es único en el País y se creó en 2018, sin embargo, en 2021 se definió como guía, avalada por organizaciones internacionales dedicadas a certificar laboratorios forenses.
En febrero, los especialistas la mejoraron, con factores comunes en la CDMX que deben tomarse en cuenta. Además, el Incifo videograba todas la necropsias.