Las imágenes fueron captadas el pasado lunes alrededor de las 12:00 horas, tras un recorrido por el lugar anteriormente mencionado, en donde se observan a varias personas (en su mayoría adultas) y una pequeña de aproximadamente nueve años con un sombrero de color rosa, un pantalón de mezclilla y una blusa celeste con la imagen de “Elsa y Anna”, personajes de la película de Frozen.
En agosto del 2022, el gobierno de Estados Unidos anunció que destinaría fondos para el estado con la finalidad de reducir la explotación laboral en menores de edad
En el sitio sólo se ven sembradíos, un poco de árboles y una casa blanca; en medio de esas hectáreas, a la pequeña se le observa recolectado cebolla, una de los cultivos que de acuerdo con otros jornaleros, es de temporada, al igual que el tomate y el chile.
Esto ocurre pese a de que, a partir del 2012, la Ley Federal del Trabajo incluyó el catálogo de trabajos prohibidos para las niñas, niños y adolescentes con la finalidad de salvaguardar su integridad física y emocional ante la peligrosidad que representan estas labores.
Un año después de este decreto, el Gobierno de la República (exactamente en junio del 2013), creó la Comisión Intersecretarial para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y Protección de Adolescentes Trabajadores en Edad Permitida en México.
Datos periodísticos publicados en esta misma casa editora en agosto del 2022, dieron a conocer que Chihuahua figuraba como uno de los cinco estados mexicanos en los que el Departamento del Trabajo de Estados Unidos invertiría un fondo millonario para reducir las formas de explotación laboral como el trabajo infantil detectado por las autoridades norteamericanas.
El fondo de ayuda fue de siete millones de dólares para las cinco entidades señaladas en las que se encontraban: Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Guerrero y Oaxaca, donde se emplean más de 145 mil personas; según datos recopilados en el documento “Hallazgos sobre las peores formas de trabajo infantil”, difundido en 2021.
Dicho informe, también refiere que en Guanajuato detectaron a 90 niños que realizaban trabajo infantil, mientras que en el estado de Chihuahua, identificaron a 24 menores de ascendencia indígena que laboraban en la agricultura.
El próximo 12 de junio se conmemora el Día Mundial contra el Trabajo Infantil con la finalidad de generar conciencia sobre la magnitud del fenómeno y sumar esfuerzos para erradicarlo.
De acuerdo con las Naciones Unidas, muchos niños en todo el mundo participan en formas de trabajo remuneradas y no remuneradas que no son perjudiciales para ellos.
Sin embargo, se consideran niños trabajadores cuando son demasiados jóvenes para laborar o cuando participan en actividades peligrosas que pueden comprometer su desarrollo físico, mental, social o educativo.
En los países menos adelantados, algo más de uno de cada cuatro niños (de 5 a 17 años) realiza trabajos que se consideran perjudiciales para su salud y desarrollo.
Según esta misma fuente, África ocupa el primer lugar entre las regiones, tanto por porcentaje de niños en trabajo infantil (un quinta parte) como el número absoluto de niños en situación de trabajo infantil: 72 millones. Asia y el Pacífico ocupan el segundo lugar con un siete por ciento y 62 millones en términos absolutos.
En lo que respecta a las labores en los campos agrícolas, la Ley Federal del Trabajo prohíbe la ocupación laboral de menores de edad e, incluso, lo tipifica como un delito, imponiendo una pena de prisión que va de uno a cuatro años y multas de 250 a 5 mil veces la Unidad de Medida y de Actualización (Uma).
La UNICEF cataloga como las peores formas de trabajo infantil la esclavitud, el reclutamiento forzado, la prostitución, la trata, la obligación de realizar actividades ilegales o la exposición a cualquier tipo de peligros.
Así mismo, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) señala que estas actividades pueden producir efectos negativos, inmediatos o futuros para el desarrollo físico, mental, psicológico o social, del niño o la niña e impide el disfrute pleno de sus derechos humanos, en especial obstaculiza su asistencia o permanencia en la escuela y reduce su rendimiento en ella.
En un documento de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el organismo da a conocer que este es un problema social multifactorial, que aunque por lo general se asocia a contextos de pobreza, también depende en gran medida de los empleadores que demandan mano de obra de personas menores de edad bajo argumentos como la reducción de sus costos de producción, o que las niñas, niños y adolescentes son más ágiles o rápidos para ciertos trabajos manuales.
Además, señala que no existe una solución única para eliminar el trabajo infantil y que debe buscarse la participación de los diferentes actores sociales para encontrar y establecer alternativas que atiendan el fenómeno de una manera integral y transversal.