Tras platicar con las afectadas, Jáuregui comentó a medios de comunicación que al chofer causante del accidente identificado como Gerardo L., se le hicieron los exámenes toxicológicos necesarios en los que no se registró ninguna irregularidad, por lo que dijo, aún no se explica el origen de dicho accidente.
“Es incluso gente que tiene años desarrollando su actividad por eso es que no nos explicamos qué es lo que pudo haber ocurrido (…) Sí yo estuve presente, en el lugar yo estaba desayunando ahí, entonces les puedo asegurar y además ya se hicieron los exámenes toxicológicos que se tienen qué hacer inmediatamente cuando hay un percance de este tipo”, expresó a las afueras del hospital.
Asimismo, manifestó que lo bueno, dentro de todo fue que no se presentó una tragedia qué lamentar y aclaró que en el momento el chofer nunca se bajó de la camioneta por lo que descartó los rumores de que las personas que fuero testigos lo quisieran linchar como se había manejado esta mañana.
Precisó que Jacqueline de 23 años tiene una fractura en la tibia y su madre Rosa Imelda de 40 años está sin mayores afectaciones y caminando de manera habitual.
Expuso que él se bajó de la camioneta para revisar la situación sin embargo se retiró debido a que así lo establecen ciertos protocolos.
Dijo ademas que a los dos afectados de la etnia Tarahumara que no pidieron traslado al servicio médico, se les pidió firmar un documento en el que se confirmaba que no presentaron mayores afectaciones, para cubrir cualquier eventualidad y fueron apoyados por representantes de su comunidad.
“Hemos estado dando la cara en cualquier momento, hubiera ocurrido lo que hubiera ocurrido; son accidentes son muy lamentables y vamos a hacer la revisión”, compartió.
Reiteró que la situación no fue normal, pues la camioneta ‘se fue para enfrente’ al especular que pudo haber sido una falla técnica, y defendió que su custodio es un policía de carrera de más de 15 años de experiencia, quien está enfrentando los hechos.