México tiene la propuesta de cambiar para 2025 la entrada en vigor del decreto que prohíbe de plano la importación de maíz modificado genéticamente.
Al respecto, el Gobierno estadounidense tiene “graves preocupaciones” por la política de México para paulatinamente eliminar el maíz transgénico, por impulso del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Doug McKalip, jefe negociador agrícola de la Representación Comercial de EE.UU. (USTR), señaló que aunque aprecian la postura de México por cambiar su decreto para que entre en vigor en 2025, les parece insuficiente.
“Estos cambios no son suficientes y el enfoque propuesto por México, que no se basa en la ciencia, aún amenaza con interrumpir miles de millones de dólares en el comercio agrícola bilateral”, dijo McKalip en comunicado conjunto con Alexis Taylor, subsecretario de Comercio y Asuntos Agrícolas Extranjeros de Estados Unidos.
Las declaraciones de funcionarios de Estados Unidos ocurren luego de reunirse con Raquel Buenrostro, secretaria de Economía de México.
Han sostenido reuniones con altos funcionarios mexicanos en la materia y acusan que dañará seriamente la economía agrícola de Estados Unidos y a los ganaderos mexicanos, lo cual pegaría en la seguridad alimentaria.
Amagaron con acudir al mecanismo del T-MEC para tomar acciones y medidas contra México en caso de no cambiar la política contra el maíz transgénico.