Destacó que la proyección de bajar en un 8 por ciento la inflación a través de la disposición de productos de importación más baratos se puede lograr quitando más aranceles y trámites burocráticos a las compras que se hagan con países que tienen certificaciones de sanidad e inocuidad.
Añadió que también se puede abaratar los productos en México si se revisa bien toda la cadena de producción, distribución y comercialización y se percibe dónde se le puede pedir a algún eslabón que baje sus márgenes de utilidad.
“Hay que revisar los eslabones de toda la cadena para ver dónde se le puede sugerir que ajuste un poco su utilidad”, apuntó el presidente del CEACH.
Precisó que no se puede pedir a algún eslabón que rebaje sus precios al 50 por ciento, ya que no hay forma de que eso sucediera.
González Ruiz indicó que el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador ejemplificó que se podría traer carne barata de Argentina, el problema es que ese país tiene regiones con problemas de fiebre aftosa, y es por lo que no debe entrar producto de esa nación.
Planteó que ésa no es la forma más adecuada de solucionar el problema de la inflación y los altos precios de la canasta básica, ya que si bien puede incidir en una baja temporal de los precios, los perjuicios serán de largo plazo porque se va a afectar a toda la inocuidad y el estatus sanitario ante los socios comerciales.
Reiteró que con la quita de aranceles y trámites burocráticos, sería suficiente para importar carne de lugares que lleguen a México con sanidad e inocuidad, por lo que no es bueno aferrarse a importarla de Argentina u otro país con producto barato.
Si ese país tuviera la sanidad e inocuidad que hay en México, los ganaderos y exportadores argentinos ya estarían vendiendo a otros mercados como los que hay aquí, y estaría al mismo precio, explicó.
Apuntó que para las naciones que no cuentan con la sanidad e inocuidad necesaria de sus productos, pueden ofrecer sus productos más baratos y tener una ganancia marginal.
El presidente del Consejo Estatal Agropecuario de Chihuahua indicó que si se busca reducir un 8 por ciento el precio de la canasta básica, es preferible buscarlo en toda la cadena productiva y comercial que tratar de importar producto de dudosa calidad.
Reiteró que se puede incentivar la importación de productos de países que estén certificados en inocuidad y sanidad, y con los cuales se tienen tratados o acuerdos comerciales, y sólo faltaría reducir un tanto más los trámites burocráticos para reducir los costos de operación.
Arturo González indicó que si bien se tienen altos precios promedio por un kilogramo de carne en el mercado, que superan los cien pesos, según la presentación que se trate, el precio del productor no se ha ajustado en la medida que se ha dado al consumidor final.
Finalmente, dijo que derivado de la inflación algunos podrán aprovechar que todo está subiendo para aumentar lo que realmente no se ha impactado al alza.