CDMX.- Morena y aliados, con apoyo de la priista Sylvana Beltrones, dieron anoche el primer paso en el Senado para consumar la participación de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad hasta 2028.

En reunión de comisiones, con 19 votos a favor, 10 en contra y 1 abstención, fue aprobado el dictamen que prevé «controles» en la labor del Ejército en seguridad.

Algunas de las medidas son la comparecencia de miembros del gabinete de seguridad, la presentación de informes semestrales con indicadores de desempeño y una bolsa presupuestal para seguridad hasta 2024.

El bloque de contención (PAN, MC, PRD y Grupo Plural) pedía incluir un plan de transición policial, que no fue incluido.

La senadora priista Sylvana Beltrones votó en favor del dictamen que presentó Morena. Su correligionaria Claudia Ruiz Massieu dijo que la propuesta era mejor que la original, aunque descalificó que se asignara una bolsa presupuestal a partir de 2024 a estados y municipios.

El perredista Miguel Ángel Mancera se inclinó por la abstención, y, con la división que afloró en el PRI, una fuente estimó que se envían señales en el sentido de que el dictamen podría ser aprobado hoy por el pleno, en la lógica de que Morena podría cachar más votos opositores.

De último momento, Morena presentó un dictamen ampliado –con ocho hojas en vez de las tres de la primera minuta– para que los integrantes del Gabinete de Seguridad comparezcan ante una comisión bicamaral y ante el Senado, aunque en la Constitución ya está señalada esta condición.

Además, presumió la asignación de una bolsa presupuestal para fortalecer las policías locales, pero a partir de 2024, y no para el próximo año, y la presentación de informes semestrales sobre la participación de militares en la Guardia Nacional.

El bloque de contención también presentó una propuesta, que fue bateada por Morena, y que planteaba verdadero control legislativo, presupuesto real, un observatorio ciudadano y un plan estratégico de retiro de las Fuerzas Armadas.

Los panistas Julen Rementería, Damián Zepeda, Indira de Jesús San Román y Nadia Navarro votaron en contra, así como Clemente Castañeda, de Movimiento Ciudadano.

Por el grupo plural, Germán Martínez alzó la voz cuando afirmó que quería ver «derrotados y humillados a los hijos de la chingada criminales».

«Quiero ver un México en paz civil, no un México en paz militar», dijo.

El ex morenista llegó a reconocer que el dictamen presentado ayer era «mejor que el original». Irónico, dijo que la morenista Lucy Meza había guardado con celo profesional el documento, lo que dejaba ver la pertinencia de que El Ejército le diera sus archivos.

La morenista Imelda Castro estimó que no debía haber espacio para las descalificaciones.

«Se están atendiendo las preocupaciones de la oposición: que haya un fondo económico para las policías locales», planteó.

El panista Julen Rementería afirmó que la nueva propuesta, amén de que no aportaba nada, implicaba una «simulación.

«Redacten lo que redacten, no va a ser una Guardia Nacional civil», alegó el también panista Damián Zepeda, quien propuso que la Oposición se endureciera en la lógica de que a Morena no le alcanzaban los votos en el pleno.

«¿Quieres los votos? Echa para atrás la reforma inconstitucional que aprobaste para que la Guardia sea civil. Lo votas y entonces seguimos dialogando. Vota primero el presupuesto y entonces te creo», repuso.

Clemente Castañeda, de MC, calificó la propuesta de una «simple ocurrencia».

«Mientras sean ejercicios de simulación, no cuenten con nosotros», advirtió.

Su correligionario Noé Castañón, dijo que no veía cambio alguno. «Es una vil vacilada todo esto, y lo único que deja ver es que no hay cambios».

El perredista Miguel Ángel Mancera recordó que las Fuerzas Armadas siempre habían exigido un marco normativo para su actuación en tareas de seguridad pública.

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