«He jugado contra él con el Marsella y le metí el gol más bello de mi carrera en Ligue 1. Lo volví a enfrentar en México desde que está en el América y le he metido algunos más también. Ahora estamos en Tokio y espero que no haya excepciones», declaró, sonriendo, el delantero de Tigres en rueda de prensa.
El capitán de la selección francesa olímpica repitió también que este duelo frente a México es «un partido especial» para él.
«Hace seis años que vivo allí, tengo hijos que ahora son mexicanos. Es especial», explicó.
Interrogado sobre su reencuentro con Gignac, Ochoa no se refirió al famoso gol que le marcó el francés en Ajaccio, pero estimó que el ex jugador marsellés había «hecho historia en el fútbol mexicano».
«Está bien reencontrarlo una vez más. Ya nos hemos enfrentado en L1, en México, y ahora en los Juegos. Son buenos recuerdos y el destino lo ha querido así», dijo, en francés.
«Es peligroso. Habrá que prestarle la atención necesaria».